El delantero argentino Lionel Messi llegó ayer a Tokio rodeado de centenares de fans nipones para preparar con sus compañeros de la selección albiceleste el partido amistoso de mañana frente a Japón.
Messi aterrizó en el aeropuerto de Narita con sus compañeros del Barcelona Javier Mascherano y Gabi Milito, que completan la lista de los jugadores argentinos del club azulgrana concentrados en Tokio para el choque en el Saitama Stadium, a las afueras de la capital nipona, ante los "Samurái Blue".
Un sonriente Messi, el gran reclamo de este partido para el que se han agotado las entradas desde hace días, fue recibido por varios centenares de aficionados japoneses ávidos de autógrafos de la estrella azulgrana, según un portavoz del aeropuerto.
La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) perdería 200.000 dólares si Messi no juega en el Saitama Stadium, con capacidad para 63.700 personas.
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