“Me siento muy contento de estar acá en mi casa. Esta fue una casa que nunca olvidé y que siempre pensé que algún día iba a volver, jugándomela más duro porque tengo un prestigio y un cariño por los ecuatorianos”, dijo Gómez al ser presentado por la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
El preparador físico colombiano Helkin Sánchez acompañará al Bolillo en el entrenamiento de la selección ecuatoriana, que fracasó en su intento de llegar a Rusia-2018.
“Hernán y Helkin vuelven a su casa, vuelven a su selección con más experiencia en eliminatorias, con más experiencia en mundiales”, destacó el presidente de la FEF Carlos Villacís en la bienvenida.
Gómez, quien dirigió a la selección ecuatoriana entre 1999 y 2004, regresa con los ojos puestos en la Copa América de Brasil-2019 y las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de Catar-2022, y con el reto de reformar el equipo de Ecuador.
“El camerino lo mejoramos porque va a venir gente que quiera venir, gente que quiera llegar, gente que piense más en la camiseta que en cualquier otra cosa”, expresó Gómez con respecto a los jugadores.
Aunque reconoció que tuvo otras propuestas en Sudamérica y Centroamérica, Bolillo contó que sentía mucha “ilusión” de volver a la tricolor, que ha sido su consentida.
El Bolillo llevó a la máxima cita del fútbol a Colombia (Francia-1998), Ecuador (Corea del Sur y Japón-2002) y Panamá (Rusia-2018). Con los dos últimos consiguió la hazaña de clasificarlos por primera vez a un Mundial. El estratega afirmó que en Ecuador “hay cualquier cantidad” de futbolistas con características para integrar la selección, a la que dejó tras el rotundo fracaso en la Copa América de Perú-2004.
Mientras dirigía a Ecuador, el Bolillo sufrió en 2001 un atentado criminal en Guayaquil que le llevó al quirófano para corregir una fractura en su nariz y extraer una bala de su pierna.
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