Los portugueses recibieron hoy la candidatura de su compatriota Luís Figo a la presidencia de la FIFA con una mezcla de entusiasmo, por lo que su figura podría representar al fútbol, y de incertidumbre, debido a la dificultad de batir al actual presidente, el suizo Joseph Blatter.
"Fue un jugador sensacional y la influencia que tuvo a nivel europeo e incluso mundial puede ser una baza importante", declaró a EFE un joven portugués, quien vio su paso por los terrenos de juego como otra activo de su candidatura.
Otro portugués, aficionado del Sporting de Lisboa -club de formación de Figo-, se refirió al "tejemaneje" que pueda existir alrededor de la votación para presidente de la FIFA, que se celebrará el 28 y 29 de mayo en Zúrich (Suiza).
"Posibilidades tendrá, pero desconozco los juegos de intereses que se mueven para ser presidente de la FIFA", asumió el hincha, quien aún está resentido con el legendario futbolista por haber preferido retirarse en el Inter de Milán y no en el Sporting.
A la leyenda portuguesa que se hizo mundialmente famoso en el Barcelona y el Real Madrid se unen el propio Blatter (en la presidencia desde 1998); Michael van Praag, presidente de la Federación Holandesa de Fútbol (KNVB); el príncipe Ali bin Al Hussein, de Jordania; el antiguo dirigente de la FIFA Jerôme Champagne y el jugador David Ginola, ambos franceses.
Las críticas al largo mandato de Blatter son masivas entre los portugueses, agravadas desde que a finales del 2013 ridiculizó en un acto a Cristiano Ronaldo, al que imitó simulando un paso militar.
El nítido apoyo a Figo también procede incluso de los que no siguen el fútbol, pues celebran que Portugal, un pequeño país de 10,5 millones de habitantes, pueda contar con un compatriota como líder del balompié mundial.
"Para Portugal se abren expectativas positivas" internacionalmente, corroboró una portuguesa de mediana edad. Al entusiasmo de los portugueses de a pie hay que sumar el del propio Gobierno conservador.
"Tanto para el deporte portugués, y particularmente para el fútbol, sería un honor enorme poder contar con alguien del prestigio de Luís Figo al frente de los destinos del deporte rey", manifestó hoy el portavoz gubernamental, Luís Marques Guedes.
Hasta en el Benfica, club rival del Sporting en el que creció Figo, ha caído bien la candidatura del exjugador. "Es una oportunidad para debatir el futuro del fútbol mundialmente y, desde ese punto de vista, es saludable que se haya presentado alguien que, con su experiencia y capacidad, sea capaz de traer nuevas ideas encima de la mesa", sostuvo el presidente del Benfica, Luís Filipe Vieira.
El presidente de la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF), Fernando Gomes, es uno de los principales promotores de la candidatura del ex jugador, del que destacó la "tenacidad" y "capacidad" que el fútbol necesita.
"Fue una decisión ponderada, basada en las ganas de un cambio, de una visión reformista, en la necesidad que veo de dar más transparencia a una institución que va perdiendo credibilidad", dijo en un mensaje divulgado en la FPF el miércoles Figo, cuando se oficializó su intención de dirigir la FIFA.
"Miro a la reputación de la FIFA en este momento y no me gusta lo que veo. El fútbol merece algo mejor", agregó el exjugador, quien abogó por parar la "imagen de degradación" del deporte Rey.
Luís Filipe Madeira Caeiro, "Figo", que representó al Barcelona y el Real Madrid en la década de los 90 y comienzos de este siglo, fue ganador del Balón de Oro en el año 2000 y llevó a Portugal al subcampeonato de Europa en 2004 y al cuarto lugar en el Mundial del 2006.
Nacido en Lisboa el 4 de noviembre de 1972 y criado en Almada (afueras de la capital), también jugó en el Sporting de Lisboa y el Inter de Milán, donde se retiró en el 2009 y club del que fue director de relaciones internacionales.
Figo aún ostenta el récord de partidos internacionales con la camiseta de Portugal, con 127, por delante del propio Cristiano Ronaldo (118).
No hay comentarios:
Publicar un comentario