Miles de aficionados argelinos han salido a las calles de la capital para apoyar a su Selección de fútbol, que regresó ayer al país tras su eliminación en la fase de octavos de final de la copa del mundo del Brasil tras caer derrotada ante Alemania por 2-1.
Con petardos y todo tipo de fuegos artificiales, ondeando banderas y al grito de "One, two, three viva la Algerie" los aficionados animaron a su equipo en su recurrido desde el aeropuerto Huari Bumedian hasta el Ministerio de Deportes.
"¡Slimani!,¡Buguerra!", gritaban los aficionados, móvil en mano, con la intención de inmortalizar un saludo de sus héroes montados sobre un autobús de techo descubierto con el que llevaron a cabo su periplo por las calles de Argel.
Desde primeras horas de la mañana, cientos de personas se fueron congregando en la céntrica plaza de la Grande Poste (La Posta, como la llaman los argelinos), donde miles de personas vibraron con las derrotas y victorias de su equipo a través de una pantalla gigante instalada por las autoridades locales.
La selección dirigida por el bosnio Vahid Halilhodzic, que quedó eliminada tras caer derrotada por Alemania en el tiempo de descuento de octavos de final, pasará a la historia como el equipo nacional que más lejos ha llegado en un mundial.
En las tres incursiones mundialistas anteriores (España 1982, México 1986 y Sudáfrica 2014), los Zorros del Desierto no lograron superar la fase de grupos.
Además, son también la escuadra argelina en marcar más goles en un mundial (7) y el equipo africano que más tantos ha logrado en un partido de una cita mundialista, los cuatro marcados a Corea del Sur en la fase de grupos.
Tras el recibimiento, la selección argelina montó en un autobús descubierto, pintado con los colores de la bandera nacional y con el nombre de cada uno de los jugadores inscrito en su carrocería.
El bus hizo un recorrido por las principales calles de la capital argelina, seguido por miles de personas, mientras por las plazas sonaba música folclórica en espera de los "héroes nacionales".
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