Los partidos del Mundial Brasil 2014 se disputarán en 12 ciudades del vecino país y la misma cantidad de estadios, pero resulta que los escenarios se han convertido en una de las mayores preocupaciones de los anfitriones y de la propia FIFA. Hasta hace menos de un mes eran solo siete los escenarios que estaban concluidos, luego inauguraron dos más y restan tres en los que se trabaja a contrarreloj.
El Arena Corinthians, de San Pablo, donde se jugará el partido inaugural entre Brasil y Croacia el 12 de junio, el Arena da Baixada de Curitiba y el Arena Pantanal de Cuiabá sufrieron retrasos, pero la FIFA y las autoridades brasileñas garantizan que estarán listos a tiempo.
Los trabajos en el Arena Corinthians marchaban viento en popa hasta que en noviembre del año pasado murieron dos obreros en un accidente que obligó a retrasar la entrega del escenario para mediados de abril. Por otro lado, el Arena Pantanal tenía previsto finalizarse en octubre de 2013, pero es posible que se lo haga recién en unos días más.
El escenario estuvo en la cuerda floja por los retrasos es el Arena da Baixada, pero la FIFA lo ratificó como sede el 18 de febrero y tendrá que ser entregado en mayo, un mes antes del inicio de la competencia.
Están terminados
La mitad de los escenarios estuvieron listos el año pasado para la Copa Confederaciones, que se jugó en junio, y albergaron partidos de ese torneo, el caso del Maracaná, de Río de Janeiro; Mané Garrincha, de Brasilia; Mineirao, de Belo Horizonte; Castelao, de Fortaleza; Arena Pernambuco, de Recife, y Arena Fonte Nova, de Salvador.
En lo que va de este año se concluyeron tres estadios: el 22 de enero fue inaugurado el Arena das Dunas, de Natal; el 20 de febrero la presidenta de Brasil Dilma Rousseff dio el puntapié inicial en el Beira-Río, de Porto Alegre, aunque restan algunos pequeños detalles; y hace dos semanas fue estrenado el Arena da Amazonía, de Manaos.
Con ese panorama, Brasil calienta motores para ser anfitrión de la Copa del Mundo, a disputarse del 12 de junio al 13 de julio
Para destacar
- El 30 de octubre de 2007 la FIFA oficializó a Brasil como sede de la Copa del Mundo. Desde entonces, los organizadores tuvieron más de seis años para poner todo a punto, pero igual se atrasaron.
- Si bien el tema de los estadios preocupa, también hay otros puntos como aeropuertos, terminales e incluso los Fanfest, que son espacios públicos que permiten a los aficionados sin entradas ver los partidos en pantallas gigantes.
- Según un reciente sondeo de Datafolha (empresa dedicada a las encuestas), el porcentaje de la población que apoya la realización del Mundial se redujo del 79% en 2008 al 52% en 2014.
- Las protestas sociales generan interrogantes en el Gobierno de Brasil, que estudia medidas para evitarlas. Curiosamente, hace unos días presentaron el nuevo uniforme de la policía antidisturbios de Río de Janeiro.
- La salud de los aficionados del fútbol es otra preocupación para la FIFA, tanto dentro como fuera de los estadios. Por eso, el cuerpo médico de la organización ha diseñado una ‘mochila de emergencia médica’ para cualquier tipo de pro-blemas que tengan los hinchas.
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