Un obrero falleció ayer en la construcción del estadio Arena Corinthians, de San Pablo, sede del partido inaugural del Mundial de Brasil 2014, y se convirtió en la séptima víctima fatal de accidentes en obras para el torneo del orbe.
El trabajador -Fabio Hamilton da Cruz, empleado por una empresa tercerizada- cayó de una altura de ocho metros cuando trabajaba en la instalación de las tribunas provisorias del escenario deportivo. Fue llevado a un hospital, donde murió horas después.
En un comunicado, Fast Engenharia, responsable de esta parte de la obra, informó de que Cruz "portaba todos los equipos obligatorios de seguridad" a la hora del accidente.
En una última nota oficial, publicada antes de la muerte, el club Corinthians, propietario del estadio, lamentó sobremanera el accidente.
En total han muerto siete trabajadores en las obras del Mundial 2014, que arranca en 74 días exactos, el 12 de junio. Antes de Cruz, un técnico portugués falleció el 7 de febrero cuando una pieza metálica le cayó en la cabeza mientras desmontaba una grúa de gran porte en el estadio de Manaos (estado de Amazonas, norte).
Al momento del accidente, las obras en el Arena Corinthians, popularmente conocido como el Itaquerao, no habían sido paralizadas, según indicó más temprano la institución paulista.
El estadio ya está seriamente atrasado después del fatal accidente de noviembre pasado, en el que murieron dos personas al colapsar una grúa sobre parte de las tribunas. El tiempo es el principal rival
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