La victoria de la selección de Francia generó una gran conmoción en Europa. Es que, tras la primera anotación del equipo galo, Debuchy le encajó un beso en la boca a Giroud para agradecerle por la asistencia, en un momento importante para él, ya que era su primera anotación con la selección.
Después de ser captados por las cámaras de televisión y de los fuertes comentarios mediáticos sobre la escena, el propio Debuchy tuvo que aclarar la situación. "No nos besamos, simplemente le agradecí el pase que me dio. Somos personas muy afectuosas, pero no exageremos. Somos hombres felices", dijo.
En el Weser Stadion de Bremen, el cariñoso festejo entre ambos futbolistas ha generado una gran debate en Alemania, donde hace semanas atrás el presidente de la federación alemana de fútbol, Theo Zwanziger, exhortó a los jugadores gays a que salgan del clóset.
Sin embargo, el capitán de la selección, Philipp Lahm, declaró que la sociedad no está lista para aceptar que algunas estrellas del fútbol podrían ser homosexuales.
La imagen recuerda otras celebraciones similares, como las protagonizadas por Paul Scholes y Gary Neville, así como por Diego Maradona y Claudio Caniggia.
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