El once ideal es el siguiente:
Keylor Navass: Sin llegar al nivel de 2014, cuando se convirtió en el mejor portero y se ganó el fichaje por el Real Madrid, Keylor Navas volvió a ser el mejor valor de la selección costarricense. Miguel Layún (MEX): Fue el comodín de Osorio, que lo utilizó en varias posiciones y siempre cumplió. Durante el Mundial cerró su pase al Villarreal.
Diego Godín (URU): Se convirtió en una muralla la defensa uruguaya y además aportó jerarquía en los momentos más complicados. Ejerció de líder de la Celeste.
Yerry Mina (COL): No ha habido un central que haya influido más en el juego de su equipo que el barcelonista, que marcó goles decisivos para su selección gracias a su poder cabeceador.
Diego Laxalt (URU): Interior reconvertido a lateral que hizo un gran despliegue físico y dio mucha profundidad al conjunto de Óscar Washington Tabarez. Comenzó como suplente pero se hizo con el puesto.
Casemiro (BRA): El equilibrio que mostró la selección brasileña en el comienzo del torneo se debe, sobre todo, a Casemiro. Perfecto tácticamente.
Héctor Herrera (MEX): Su incansable trabajo en el medio centro. Fue el seguro mexicano, que destacó en la gran victoria sobre Alemania.
André Carrillo (PER): No sólo marcó el primer gol peruano después de 36 años, sino que se mostró muy incisivo por su banda.
Coutinho (BRA): Con la libertad que le dio Tite en la media punta fue capaz de tirar del equipo y marcó un gran gol contra Suiza.
Juan Fernando Quintero (COL): En ausencia de James, lastrado por su condición física, Quintero confirmó lo que ya había apuntado cuatro años antes; gran calidad y una zurda de oro. Sobresaliente frente a Polonia.
Edinson Cavani (URU): Tardó en marcar, pero su conexión con Luis Suárez es letal y fue decisivo en la clasificación a los cuartos de final, con un doblete ante Portugal. Uruguay acusó su ausencia frente a Francia.
EFE
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