El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, anticipó ayer una serie de “reglas muy claras y estrictas” para hacer más transparentes los traspasos de jugadores que, según dijo, no van a ser bien recibidas por todos.
Tras culminar en Lima la última sesión de la segunda ronda de cumbres ejecutivas de la FIFA, Infantino indicó que “desafortunadamente” esas reglas todavía no existen y aún son objeto de debate en el seno del órgano rector del fútbol mundial.
“No hemos llegado a una conclusión. Son temas muy complejos. Queremos tomar decisiones sobre todo protegiendo a los clubes que forman jugadores. El dinero en sí mismo no es un problema si es utilizado de manera transparente y correcta”, dijo Infantino en una conferencia de prensa a la que solo fueron invitados medios locales.
El máximo responsable de la FIFA defendió la transparencia de las cuentas del organismo en los últimos años y manifestó su intención de “trabajar por el fútbol”. “Yo era uno de los críticos de la FIFA. Lo importante es hacer las cosas transparentes. Si comparamos los informes económicos de la FIFA hace unos años con los de ahora, son la noche y el día. Tenemos que decir muy claramente cómo ingresamos el dinero y en qué lo invertimos”, explicó.
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