El técnico de la selección peruana, el argentino Ricardo Gareca, alista variantes para la revancha con Nueva Zelanda, el próximo miércoles, por la repesca del Mundial de Rusia 2018.
Perú logró un empate sin goles en condición de visitante, con una victoria escribiría su nombre en el Mundial, luego de 36 años.
El DT cuenta con tres días contra el reloj para decidir si Raúl la “Pulga” Ruidíaz será el “9” que no fue Jefferson Farfán en Wellington.
Y más bien, aprovechar el buen pie y velocidad de la “Foquita” Farfán en su puesto habitual: extremo derecho en reemplazo del sobrio André Carrillo.
Otro puesto en discusión es el de Aldo Corzo. Nadie critica su compromiso y temperamento, pero sus limitaciones para atacar son evidentes, más si Perú necesita sumar hombres en ofensiva en búsqueda del gol. Por eso, el “Rayo” Advíncula surge como una alternativa, basándose en su desequilibrio, velocidad y verticalidad.
Gareca decidirá sus mejores armas. “Tengo fe y confío en el potencial del equipo para ganar”, confesó. En respuesta, la hinchada le pide cambios para ganar.
La selección peruana llegó ayer a Lima y de inmediato se dirigió a su concentración.
Los dirigidos por Gareca llegaron al aeropuerto Jorge Chávez la noche de este sábado y fueron recibidos por un grupo de hinchas.
El grupo abordó un bus para dirigirse a la concentración con miras al partido de vuelta con Nueva Zelanda en el Estadio Nacional de Lima.
AGENCIAS
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