La mayor parte de los preparativos para el Mundial de Rusia 2018 siguen el curso normal y no tienen atraso, afirmaron ayer las autoridades del país, añadiendo que los contratiempos por la parada en las obras del estadio de San Petersburgo serán solucionados.
Vencedora en una licitación organizada de urgencia, la empresa Metrostoi asegura que el estadio estará listo, el próximo 26 de diciembre.
Según el director general de Metrostoi Vadim Alexandrov más de 1.400 obreros trabajan en la obra del estadio, situado en una isla al oeste de San Petersburgo y en construcción desde 2007.
El viceprimer ministro ruso Igor Chouvalov señaló que Rusia no tenía necesidad de "ciudades reserva", lo que significa un plan B para la Copa del Mundo, durante su visita al estadio de Saransk, la ciudad más pequeña de las que acogerán el torneo (unos 300.000 habitantes).
"Los puntos más importantes estaban en Samara y Kaliningrado pero fueron resueltos", declaró.
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