La selección de Francia cerró el ciclo de encuentros internacionales con un triunfo ante Polonia, sellado con el gol originado por Charles N’Zogbia pero marcado en propia puerta por Tomasz Jodlowiec (1-0) y un puñado de conclusiones para el preparador Laurent Blanc, que puso en escena a futbolistas poco habituales en las citas bleus. Sin los pesos pesados del equipo, sobre los que recae la responsabilidad de lograr el pasaporte para la próximas Eurocopa y Mundial, Francia tiró de cantera. Con los ojos puestos en Marvin Martin, la flamante sensación del fútbol galo, autor de dos goles ante Ucrania, el pasado lunes.
El centrocampista del Lille, el campeón de la Liga francesa, salió de inicio. Ofreció detalles el futbolista alentado por Zinedine Zidane. Aunque el protagonismo final lo acaparó Charles N’Zogbia, que marcó el único gol del partido.
El centrocampista del Wigan inglés rentabilizó una acción de Bacary Sagna. Su tiro fue desviado ligeramente por el zaguero Tomasz Jodlowiec y eso desorientó al meta Wojciech Szczesny.
Francia superó a su adversario, apresurado en componer un equipo solvente que plante cara en la próxima Eurocopa, que se encargará de acoger junto a Ucrania.
El cuadro galo pudo lograr un marcador mayor, sobre todo con acciones de Guillaume Hoarau y Matthieu Valbuena. También de Florent Malouda en el tiempo añadido.
Los cambios acabaron con el ritmo del partido, que desapareció en la segunda mitad. El juego se ralentizó a causa de las numerosas interrupciones, que no evitaron la victoria francesa antes de enfilar los compromisos del próximo curso.
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