El pulpo Paul, que saltó a la fama por sus dotes adivinatorias en el Mundial de Sudáfrica, recibió ayer un certificado de nacimiento en la localidad italiana de Marina di Campo, en la isla de Elba, en cuyas aguas fue pescado, según sus habitantes, que se preparan para el homenaje al cefalópodo.
“No es inglés, el pulpo Paul es italiano y, para más detalles, de la isla de Elba”, aseguran en el ayuntamiento de la isla de Elba.
El pulpo que asombró al mundo por el acierto en sus vaticinios de ocho resultados del pasado Mundial vive en el acuario de Oberhausen, en Alemania.
La fiesta, que se celebró ayer en la plaza Dante de la localidad, se ha organizado además con motivo de los seis años de Paul y, por supuesto, la madrina será su pescadora en aguas de la minúscula isla de Elba, donde Napoleón vivió sus últimos días.
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