La ciudad brasileña de Natal se anima con la opción de organizar algunos de los partidos del Mundial Brasil 2014 programados para Curitiba, pero sus autoridades prefieren esperar a que el estadio Arena da Baixada sea concluido a tiempo y que no sea necesario que la FIFA busque otras alternativas.
Natal puede ser una de las ciudades favorecidas en caso de que Curitiba no termine su estadio a tiempo y que la FIFA opte por transferir a otros estadios los partidos programados para el Arena da Baixada. Natal, que en enero inauguró su estadio Arena das Dunas, será sede de tres de los partidos del Mundial. “No es bueno para el país que alguna de las 12 ciudades escogidas se quede fuera. No va a darnos una buena imagen”, dijo Demetrio Torres, secretario para asuntos del Mundial de Río Grande do Norte.
Reconoció que partidos adicionales pueden darle una mayor divulgación a Natal, ciudad en el noreste de Brasil que apuesta en su permanente clima tropical y en sus idílicas playas para atraer turistas de todo el mundo.
Recién inaugurado
El estadio Arena de las Dunas fue inaugurado el 22 de enero tras dos años y cinco meses de obras y pese a que el inicio de su construcción fue el que más se atrasó. Los temores por un posible atraso en la entrega ahora fueron transferidos a Curitiba, ciudad a la que el secretario general de la FIFA, Jérôme Valcke, le dio plazo hasta el 18 de febrero para que muestre avances en las obras con la amenaza de retirarle el derecho a organizar cuatro de los partidos del Mundial.
En el Arena de las Dunas aún hay movimiento de obreros, pero para la limpieza, la instalación de las últimas piezas de la cobertura y la realización de pruebas de la estructura del pasto. En el estadio aún tienen que ser instaladas 10.000 sillas provisionales que elevarán la capacidad a 42.000 espectadores, la cifra exigida por la FIFA
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