Además del resultado, los jugadores ingleses tuvieron la fortuna de no sufrir ningún contratiempo de orden físico en el estadio Maruleng por lo que Capello podrá disponer de todos sus hombres para su debut, el día 12, contra Estados Unidos.
Capello alineó a dos equipos casi completamente distintos en los dos tiempos. De los titulares, sólo Jermain Defoe, autor del primer gol a los 4’, permaneció en el equipo base tras el descanso.
En la segunda mitad, Andy Cole logró el segundo tanto en el minuto 63 y Wayne Rooney cerró la cuenta en el 85.
Rooney revolucionó el equipo con su entrada en el segundo tiempo. El delantero del Manchester desbordó a menudo la defensa adversaria y se reafirmó como el jugador indispensable en el ataque inglés, ante la actuación discreta de Emile Heskey y Peter Crouch.
Capello hizo debutar a Michael Dawson y ensayó con Steven Gerrard por el centro delante de la defensa, en lugar de evolucionar por la izquierda.
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