Las calles de Pyongyang, capital de Corea del Norte, estaban vacías ayer desde poco antes de la transmisión en directo del partido de su selección frente a Portugal, una ocasión única en el país. Sin embargo, después de la goleada, sobre la capital y todo el país hubo un silencio impactante. Los comentaristas de la TV dejaron de hablar cuando el marcador se tornó abrumador e inimaginable.
El Chosun Sinbo, el diario pro-Corea del Norte editado en Tokio que incluso tiene un enviado a Sudáfrica, comentó hoy que a la espera del partido "el subterráneo y los autobuses funcionaban, pero estaban vacíos".
Algunas empresas modificaron sus horarios de trabajo para permitir a los empleados el regreso a casa en tiempo útil para seguir el partido por TV.
La KCNA, la agencia de prensa oficial del régimen comunista, durante todo el día de ayer difundió notas relativas a la expectativa creciente con respecto al equipo de los "caballos alados" (como se lo conoce a Norcorea), sobre todo después de la prometedora actuación frente a Brasil.
Al comenzar y hasta casi la media hora, los comentarios eran más que positivos, tomando en cuenta que los jugadores norcoreanos mantenían a raya a sus renombrados rivales. Todo, hasta el primer tropiezo: el gol de Raul Meireles a los 29'.
Luego, el estupor del primer cuarto de hora del segundo tiempo, con una tripleta portuguesa que aplastó a los coreanos y a su hinchada, provocando prácticamente la desaparición de la transmisión televisiva.
Según se afirma en medios periodísticos, el líder norcoreano Kim Jong-il es un apasionado por el fútbol. Moon Ki-nam, manager del ex equipo de Corea del Norte que desertó a Corea del Sur en 2003, dijo a la prensa que el dictador norcoreano "jugó al fútbol desde cuando era chico y ama el deporte. La selección nacional siempre fue envidiada por otros atletas, porque está dotada con los mejores equipamientos", acotó.
Un funcionario de los servicios de inteligencia surcoreanos dijo a la prensa que "fue notoria la escasa presencia de Kim Jong-il en sus visitas por el interior del país, precisamente desde que comenzó la Copa del Mundo. Probablemente porque mira los partidos mas importantes hasta la madrugada por televisión vía satélite", comentó.
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