El 66º Congreso de la FIFA arranca este miércoles en Ciudad de México con la vigencia de sus estatutos reformados tras las acusaciones de corrupción que provocaron la renovación de su directiva.
Un año después de la captura de una docena de sus directivos implicados por el FBI en la obtención de sobornos por más de 150 millones de dólares, la FIFA llega a México dispuesta a pasar la turbulencia y recuperar su imagen a nivel mundial.
"El balompié está bien, los dirigentes debemos demostrar lo que hacemos y la imagen de la FIFA se está volviendo para arriba, si trabajamos juntos, el fútbol y la FIFA se irán otra vez por encima", dijo Gianni Infantino, el presidente de FIFA.
La renuncia anunciada de Michel Platini a la presidencia de la UEFA, que celebró en Budapest su congreso antes de llegar a la reunión de la FIFA, muestran que el caso todavía sigue abierto a la discusión. Infantino adelantó en un encuentro con la prensa mexicana que en esta nueva etapa que se abre, la FIFA tendrá una tolerancia cero con los tramposos y sostuvo que todos lo que tomaron dinero deberán devolverlo y ser juzgados de manera penal.
"Si alguien cree que puede hacer trampas, que se salga del fútbol y lo haga en otros sitios", dijo el dirigente al participar a principios de semana en una mesa redonda.
Los estatutos reformados por un Congreso Extraordinario celebrado en Zúrich, entraron en vigor el 27 de abril y en México la meta de las 209 federaciones apunta a temas internos sobre la forma de gobierno.
La FIFA hará una presentación de la Copa Confederaciones de Rusia 2017 y llevará a México a una pléyade de leyendas mundiales para que disputen el miércoles un partido amistoso con sus pares mexicanos con motivo del 50 aniversario del Estadio Azteca.
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