El círculo de Leoz está en cenizas

El paraguayo Nicolás Leoz fue un poderoso presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y vivía rodeado de otros dirigentes no menos importantes, quienes de a poco han ido desapareciendo o cayendo —algunos en desgracia— de sus cargos.

Entre todos hicieron de la Conmebol un imperio que hoy en día está en la mira mundial por las investigaciones internacionales por supuestos actos de corrupción.

La sorpresiva renuncia a la presidencia de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) del dirigente Luis Bedoya es una ficha más que se va de la antigua Conmebol. El único que todavía queda es Luis Chiriboga, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) desde 1998, y quien está cumpliendo su quinto mandato.

Ello sin contar que la Conmebol todavía considera como miembro de su Comité Ejecutivo (desde que ingresó en 2006) a Carlos Chávez, quien para esa entidad es aún presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). Chávez está detenido preventivamente en Santa Cruz acusado por el Ministerio Público boliviano por haber cometido varios delitos.

Leoz —en detención domiciliaria en su mansión de Asunción— y otros dirigentes son acusados desde hace meses por la Fiscalía de Estados Unidos por supuestamente haber recibido sobornos para beneficiar a determinadas empresas en la compra de los derechos de televisación.

De su grupo era Julio Humberto Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) desde 1979 hasta que falleció el año pasado. Aunque tuvo mucho que ver en la conducción del fútbol sudamericano, ya no vivió para ver la investigación que ha puesto de cabeza a este deporte en el ámbito mundial.

Ricardo Teixeira era otro, fue presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) entre 1989 y 2012. Vive en su país mientras su sucesor, José María Marín, quien entró para cumplir con el periodo hasta 2014, es uno de los dirigentes detenidos en Suiza, sede de la FIFA, hace meses.

El otro hombre de los más cercanos a Leoz era Eugenio Figueredo, también detenido en Suiza y extraditado a Estados Unidos. Presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) entre 1997 y 2006, vicepresidente de la Conmebol entre 1993 y 2013 y presidente interino de ésta entre 2013 y 2014, podría ser el hombre clave —si se presta a ello— para destapar las supuestas irregularidades, tanto en el fútbol sudamericano como mundial.

Rafael Esquivel está en la misma situación. Presidió la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) entre 1998 y 2015, y espera en Estados Unidos el resultado de las investigaciones. Con Bedoya también fuera, ese antiguo poderoso Comité Ejecutivo de la Conmebol se ha desvanecido, a no ser por Chiriboga, lo que no implica que la dirigencia de hoy esté al margen de toda sospecha.

Los datos

Napout

Juan Ángel Napout presidió la asociación paraguaya hasta noviembre pasado, cuando pasó a dirigir la Conmebol. Manuel Burga dirigió a Perú entre 2002 y 2014. Luis Chiriboga sigue en Ecuador desde 1998 y Chávez está en Bolivia desde 2006.

Actuales

Hoy presiden: Edwin Oviedo (PER), Laureano González (VEN, interino), Wilmar Valdez (URU), Marco Polo del Nero (BRA), Alejandro Domínguez (PAR), Sergio Jadue (CHI), Luis Segura (ARG), Ramón Jesurún (COL).

Luis Bedoya renunció y viajó a Nueva York

El jueves 5 de noviembre, a las 22.49, el aún entonces presidente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), Luis Bedoya, abordó el vuelo 020 de la aerolínea Avianca rumbo a Nueva York, según una nota publicada ayer por el diario El Tiempo de Colombia, medio que confirmó con autoridades de Estados Unidos la salida hacia ese país del exdirigente.

Aunque se desconocen las razones por las cuales viajó a esa ciudad, una corte federal de Nueva York lleva a cabo las investigaciones sobre los graves escándalos de corrupción que sacuden a la FIFA. A partir de ahí, hay un trascendido de que fue a entregarse. “Bedoya envió, el domingo, su carta de renuncia irrevocable al cargo, y notificó al comité ejecutivo”. Por estatutos, Ramón Jesurún asumió el mismo día el cargo.

El nombre de Bedoya no figura de manera directa en el expediente de corrupción, sin embargo, éste sí hace referencia a que las cabezas de varias asociaciones nacionales, incluida la de Bolivia con Carlos Chávez, saben de las irregularidades y, por tanto, estarían implicadas.