La organización del Mundial de fútbol de 2014 generará alrededor de 700.000 empleos en Brasil, de los que más de la mitad se crearán antes de la celebración del torneo, dijo ayer el ministro de Deportes, Orlando Silva.
El resto de empleos se creará durante la organización del Mundial, apuntó el ministro durante un seminario sobre la Copa del Mundo de 2014 celebrado en Sao Paulo.
"La Copa del Mundo es generación de puestos de trabajo, de ingresos y de desarrollo", manifestó Silva en declaraciones recogidas por la estatal Agencia Brasil.
Silva se basó en un estudio de impacto económico para asegurar que el sector de la construcción civil será el más beneficiado por la inversión destinada a la mejora de puertos, aeropuertos y sistemas de transporte público de las doce ciudades que serán sedes de la Copa del Mundo.
"En todas las obras que están previstas se necesitarán trabajadores", manifestó el ministro antes de divulgar que sólo en aeropuertos la inversión prevista asciende a 6.000 millones de reales (alrededor de 3.750 millones de dólares).
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