Los CAMPEONES DEL MUNDO, Uno a Uno

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Íker Casillas: San Íker volvió a ser vital para los intereses de la selección española. A pesar de que comenzó el Mundial con algunas dudas en las salidas, y de que las malas lenguas hablaban de distracción por parte de su pareja sentimental y periodista de campo Sara Carbonero, el Santo de La Roja fue mejorando partido a partido hasta que terminó siendo manteado por sus compañeros.

Especial mención meree la actuación en cuartos de final, contra Paraguay, en la que Casillas detuvo un penalti y un mano a mano en los últimos minutos de partido. Sus dos mano a mano contra Robben que abortó en la finalísima lo certifican. Es el capitán, el carácter y el espíritu del equipo. Nuestra bandera. Calificación 10.

Sergio Ramos: Después de una Eurocopa sin demasiado brillo y los dos últimos años en el Real Madrid con actuaciones bastante irregulares, Sergio Ramos volvió en sí con la selección española en el Mundial. Implacable en defensa, punzante con sus subidas al ataque y todo un toro en el aspecto físico.

Ramos realizó una buenísima labor en todos y cada uno de los partidos, siendo uno de los jugadores más solidarios de este pródigo equipo y sin haber cometido ni un solo error de bulto en todo el campeonato. Calificación 10.

Gerard Piqué: Es la pieza que faltaba en el equipo español para ser prácticamente perfecto, ya que aportó a la defensa esa seguridad aérea que tanto se necesitaba, además ser también el inicio de todas y cada una de las jugadas.

Siempre con criterio, en corto o en largo, pero con el balón jugado y destellos de calidad impresionantes. Además, rozó el gol en varias ocasiones con sus clásicas incorporaciones al ataque. El penalti tonto cometido contra Paraguay no empaña un gran papel en el Mundial. Calificación 10.

Carles Puyol: Enorme el Tiburón Puyol. Los años se le notan en las carreras largas, pero no en el empuje, amén de que ha ganado muchísima experiencia para colocar la defensa, no fallar en el corte y secar al delantero rival.

Además de todas estas magníficas cualidades, Puyol fue el autor del gol que colocó a España en la final de la Copa del Mundo. Su increíble salto en el remate estuvo empujado por su gran corazón y el de todos los españoles. Calificación 10.

Joan Capdevila: Muy mal en el primer partido, contra Suiza, donde se dejaron ver sus carencias defensivas y se olvidó de atacar. A pesar de esto, fue creciendo partido a partido hasta convertirse en todo un muro defensivo para el lateral izquierdo.

Sólo le faltó animarse más al ataque, aunque Ramos lo hizo por los dos. Por otro lado, su nivel defensivo ha mejorado enormemente, y los grandes números del equipo español se deben también gracias a su ayuda. Calificación 10.

Sergi Busquets: Otro que fue de menos a más. Su labor fue poco útil en el entramado defensivo del partido contra Suiza y la gente pidió su cabeza a cambio de Cesc. Del Bosque confió en él y, al final, se demostró que podía ser importante en este equipo.

Lo corta todo, no la pierde y tiene calidad para sacar la pelota jugada. Todavía le falta por seguir creciendo, pero su juventud es un gran tesoro, teniendo en cuenta el enorme jugador que ya es y en lo que se puede convertir. Calificación 10.

Xabi Alonso: Dio una de cal y otra de arena, pero terminó siendo tan importante como todos esperaban de él. Sus disparos perfectos y potentes desde fuera del área no encontraron más que un larguero, pero sus intentos fueron grandes intenciones y aportaron algo distinto a la forma de atacar de La Roja, amén de su gran trabajo en el centro del campo.

Sus cambios de juego sirvieron para mover defensas rocosas, e incluso se echaron en falta algunos más de los que nos regaló. Probablemente, uno de los pocos que le ha cogido el truco al Jabulani a la primera, y un todo terreno en el campo de juego. Calificación 10.

Xavi Hernández: El que posiblemente será el próximo Balón de Oro realizó un gran Mundial en su madurez futbolística. Xavi llegó a tener hasta tres marcadores prácticamente fijos sobre él en muchos partidos. No pudo brillar como suele hacer, pero su trabajo ocultó fue más últil que nunca.

De uno en uno, de dos en dos o de tres en tres, Xavi nunca la perdió y se deshacía del centro del campo rival. Sigue siendo el secreto del juego de este equipo. Sin él, España no podría jugar a lo que nos tiene dulcemente acostumbrados. Calificación 10.

Andrés Iniesta: Genial. También sufrió un acoso terrible, al igual que Xavi. Uno de los hombres más temidos de España, y con razón. Muy pocos jugadores de todos lo partidos lograron quitarle la pelota, pero él, en cambio, se marchaba de todos sus marcadores para marcar un golazo y regalar multitud de acciones de gol.

Iniesta es uno de los mejores jugadores del Mundo y también opta al Balón de Oro con mucha razón. Iniesta es la alegría de este equipo campeón y pone la chispa que tanto necesita la selección española. La guinda del pastel, el golazo que anotó en la final. UN CRACK MUNDIAL. Calificación 10.

David Villa: El nuevo fichaje del Barcelona fue el pichichi del Mundial y deslumbró al mundo entero con sus goles. La seleción española superaba ronda a ronda, partido a partido, siempre con sus goles. Jugó por el centro, por la izquierda y cayó hacia la derecha. Las defensas lo temieron y no sabían como detener al asesino del gol.

Villa siempre fue así, y siempre estuvo entre las listas de los máximos goleadores de todos los torneos que juega. Ahora, además de ser valorado en España, lo es en el mundo entero, algo que merecía desde hace mucho tiempo. No tuvo fortuna en la final, pero no le hizo falta. Calificación 10.

Pedro Rodríguez: Pasó totalmente inadvertido hasta las semifinales, cuando Vicente Del Bosque sacó a Fernando Torres del equipo titular para colocarlo a él como otro hombre más de la partida en el partido más importante de la historia del fútbol español.

Pedro fue el mejor hombre de ataque de La Roja en ese encuentro y los alemanes todavía deben estar preguntándose quién es ese tal Pedro. Le sobró empuje en un contraataque en el que pecó de egoísta al no cederle la pelota a Torres, pero eso no es suficiente para el salero que aportó al ataque de esta selección. En la final se ganó el puesto de titular, aunque no brilló tanto como en las semifinales, pero su trabajo fue perfecto. Calificación 10.

Fernando Torres: Probablemente fue la única decepción, aunque esa palabra es demasiado dura para colocársela de cartel. Torres llegó muy justo físicamente a este Mundial tras sufrir una dura lesión, y su juego no es el mismo sin ese punto de velocidad que lo caracteriza.

Jugó de inicio prácticamente todos los partidos, pero se apagó en todos y cada uno de ellos con el paso de los minutos para ser sustituído y comprobar como La Roja mejoraba en su ofensiva. No tuvo suerte, y tanto Pedro como Llorente o Cesc fueron mejores opciones que él. Calificación 10.

David Silva: Silva jugó el primer partido, contra Suiza, y, a pesar de haber sido uno de los mejores en la fatídica derrota, Vicente Del Bosque no volvió a contar con él para el once titular. Se le echó de menos, nadie lo puede negar, pero las cosas le fueron bien al técnico salmantino, por lo qu eno hay nada que reprocharle. Calificación 10.

Cesc Fábregas: Tuvo pocos minutos en esta Copa del Mundo, pero todos ellos fueron MUY IMPORTANTES. Siempre con criterio, siempre listo, siempre decisivo. Es un enorme jugador valorado en todo el mundo y que en este maravilloso equipo le cuesta encontrar su lugar, ya que el centro del campo está lleno de los mejores. Calificación 10.

Fernando Llorente: Llorente sólo hizo acto de presencia en el partido contra Portugal, y lo hizo perfecto para abrirle el hueco del gol a Villa. Lo volvemos a repetir, los suplentes de este equipo serían titulares en cualquier otro. Calificación 10.

Javi Martínez: Aparición prácticamente nula en el superpoblado centro del campo español. No hay sitio, pero es un grandísimo jugador y lo demostrará en el futuro. Calificación 5,5.

Pepe Reina: No jugó, porque Casillas sólo hay uno, pero su labor de apoyo al equipo es impresionante. Hace piña y lo quiere todo el mundo. Disfrutaremos en los festejos. Calificación 10.

Víctor Valdés: Al igual que Reina, en la portería no hay sitio, pero también es un gran portero y un gran compañero. Calificación 10.

Álvaro Arbeloa: Otro gran jugador que tampoco tuvo sitio. Un grandísimo jugador que cubriría con garantías cualquier baja. Calificación 10.

Juan Mata: A penas tuvo unos minutos, pero hasta el mismísimo Torres terminó siendo suplente. Es otro de los jugadores del futuro de la Roja y dará que hablar en la próxima Copa del Mundo. Calificación 10.

Jesús Navas: Entró como revulsivo en los primeros partidos, aunque no le salió demasiado bien su intención de regate y centro. A pesar de esto, también entró como revulsivo en la final y sí supuso un gran peligro para el rival. Es un grandísimo jugador al que sólo le faltó algo más de confianza. Ahora ya la tiene y nos hará disfrutar más y más a todos los españoles. Calificación 10.

Carlos Marchena: Marchena sólo entró para perder tiempo en los últimos minutos de un par de partidos, pero estuvo siempre dispuerto por si necesitase cubrir a Puyol o Piqué y lo hubiese hecho a la perfección. Calificación 10.

Raúl Albiol: No tuvo hueco tampoco en este equipo, porque la defensa no tuvo problema alguno y no fue necesario ayuda alguna. Es un enorme jugador que tendrá más protagonismo en el futuro. Calificación 10.

Vicente Del Bosque: Criticado en el inicio, tras la derrota ante Suiza, Del Bosque ha ido callando bocas una a una, acertando con TODOS sus cambios en todos los partidos. Realizó un trabajo PERFECTO Y SUBLIME, librándose de la sombra de Luis Aragonés. Del Bosque es GRANDE por sí mismo y lo ha dejado claro. UN ENTRENADOR MUNDIAL. Calificación 10.