Tras seis años de interrogantes sobre la capacidad de Sudáfrica para organizar el Mundial de fútbol, hoy, con la inauguración del torneo en el Soccer City de Johannesburgo y la simbólica presencia de Nelson Mandela en el palco, se disiparán todas las dudas.
Cuando el árbitro uzbeko Ravshan Irmatov haga sonar su silbato para que los jugadores de las selecciones de Sudáfrica y México den las primeras patadas al balón, todo un continente respirará aliviado a la vez tras las reticencias de europeos, americanos y asiáticos a aceptar que estaban preparados.
Como espectador de excepción estará sentado en el palco Nelson Mandela, uno de los símbolos del siglo XX, en el mismo lugar en el que se dirigió a la multitud cuando el estadio se llamaba FNB en 1990, tras ser liberado después de pasar 27 años en prisión por su oposición al régimen del 'Apartheid'.
Su imagen en el Soccer City se proyectará como un página histórica importante, como lo fue su presencia en la final del Mundial de rugby de 1995, cuando Sudáfrica ganó el título, en un episodio que fue llevado al cine con el filme Invictus.
A su llegada sonarán las vuvuzelas, esas ruidosas cornetas de plástico que nadie conocía, que forman parte del folklore futbolístico del fútbol local sudafricano, y que quedarán como uno de los elementos significativos de este Mundial.
El nieto de Mandela, portavoz de la familia, anunció que el símbolo de Sudáfrica sólo asistirá a los primeros 15 minutos de partido, pero no se descarta que se quede un poco más, aunque todos esperan que vuelva el 11 de julio, el día de la final, una semana antes de cumplir 92 años.
“El Mundial 2010 es más que un simple torneo deportivo. Simboliza el poder que tiene el fútbol para unir a la gente, sin importar su idioma, color y sus creencias políticas o religiosas”, dijo Mandela en un mensaje dirigido a la FIFA.
América y Europa se han repartido hasta ahora los 18 títulos anteriores, por lo que el continente africano permitirá a uno de los dos tomar ventaja, a menos que una selección local dé la sorpresa, con Costa de Marfil y Camerún, como principales opciones.
Sedes
Europa (10)
Europa organizó 10 torneos del mundo. Francia, Alemania e Italia a dos veces.
América (7)
El continente americano 7 veces, México en dos ocasiones.
Asia (1)
Corea y Japón rompieron el eje y organizaron el campeonato el 2002.
Una gran audiencia en el planeta
26 mil millones
La audiencia acumulada de los 64 partidos de la Copa Mundial de la FIFA será seguida de forma global por 26.000 millones de espectadores de todo el planeta, afirmó el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke.
Mandatarios
Un total de 20 jefes de Estado africanos estarán hoy en la ceremonia de apertura y el partido inaugural del Mundial de fútbol, en el estadio Soccer City de Johannesburgo. Habrá otros mandatarios de distintas partes del mundo, de Bolivia Evo Morales.
Partido aparte
Líderes políticos del planeta ofrecen opiniones sobre el Mundial, siendo los más prolíficos el brasileño Lula y el sudafricano Jacob Zuma. En una reunión del 'Grupo de los 5', Lula regaló camisetas de selección brasileña a los otros gobernantes.
El nerviosismo
El personal que participa en la organización del Mundial siente “mariposas en el estómago y ansiedad”, según el portavoz, Rich Mkhondo. “Lo de mañana (hoy) sera la planificación y el trabajo de muchos años de trabajo, planificando día a día”, sostuvo.
Cuando el árbitro uzbeko Ravshan Irmatov haga sonar su silbato para que los jugadores de las selecciones de Sudáfrica y México den las primeras patadas al balón, todo un continente respirará aliviado a la vez tras las reticencias de europeos, americanos y asiáticos a aceptar que estaban preparados.
Como espectador de excepción estará sentado en el palco Nelson Mandela, uno de los símbolos del siglo XX, en el mismo lugar en el que se dirigió a la multitud cuando el estadio se llamaba FNB en 1990, tras ser liberado después de pasar 27 años en prisión por su oposición al régimen del 'Apartheid'.
Su imagen en el Soccer City se proyectará como un página histórica importante, como lo fue su presencia en la final del Mundial de rugby de 1995, cuando Sudáfrica ganó el título, en un episodio que fue llevado al cine con el filme Invictus.
A su llegada sonarán las vuvuzelas, esas ruidosas cornetas de plástico que nadie conocía, que forman parte del folklore futbolístico del fútbol local sudafricano, y que quedarán como uno de los elementos significativos de este Mundial.
El nieto de Mandela, portavoz de la familia, anunció que el símbolo de Sudáfrica sólo asistirá a los primeros 15 minutos de partido, pero no se descarta que se quede un poco más, aunque todos esperan que vuelva el 11 de julio, el día de la final, una semana antes de cumplir 92 años.
“El Mundial 2010 es más que un simple torneo deportivo. Simboliza el poder que tiene el fútbol para unir a la gente, sin importar su idioma, color y sus creencias políticas o religiosas”, dijo Mandela en un mensaje dirigido a la FIFA.
América y Europa se han repartido hasta ahora los 18 títulos anteriores, por lo que el continente africano permitirá a uno de los dos tomar ventaja, a menos que una selección local dé la sorpresa, con Costa de Marfil y Camerún, como principales opciones.
Sedes
Europa (10)
Europa organizó 10 torneos del mundo. Francia, Alemania e Italia a dos veces.
América (7)
El continente americano 7 veces, México en dos ocasiones.
Asia (1)
Corea y Japón rompieron el eje y organizaron el campeonato el 2002.
Una gran audiencia en el planeta
26 mil millones
La audiencia acumulada de los 64 partidos de la Copa Mundial de la FIFA será seguida de forma global por 26.000 millones de espectadores de todo el planeta, afirmó el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke.
Mandatarios
Un total de 20 jefes de Estado africanos estarán hoy en la ceremonia de apertura y el partido inaugural del Mundial de fútbol, en el estadio Soccer City de Johannesburgo. Habrá otros mandatarios de distintas partes del mundo, de Bolivia Evo Morales.
Partido aparte
Líderes políticos del planeta ofrecen opiniones sobre el Mundial, siendo los más prolíficos el brasileño Lula y el sudafricano Jacob Zuma. En una reunión del 'Grupo de los 5', Lula regaló camisetas de selección brasileña a los otros gobernantes.
El nerviosismo
El personal que participa en la organización del Mundial siente “mariposas en el estómago y ansiedad”, según el portavoz, Rich Mkhondo. “Lo de mañana (hoy) sera la planificación y el trabajo de muchos años de trabajo, planificando día a día”, sostuvo.
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