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Con oficio y contundencia, Brasil derrotó por 3-1 a Costa de Marfil en el segundo partido de ambos por el Grupo G disputado en el Soccer City de Johannesburgo el 20 de junio. Los pentacampeones aseguraron así su presencia en los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010, mientras que los africanos quedaron con una unidad y definirán su suerte en la última jornada.
El encuentro comenzó con la cautela de ambas selecciones, que parecían medirse. Brasil, que arrancó sin mucha proyección de los laterales ni conexión entre sus volantes y delanteros, pateó al arco por primera vez a los 18 minutos, en un tiro de Robinho que se fue muy por encima del larguero.
Costa de Marfil tuvo algunos minutos de buen funcionamiento y dispuso de un par de pelotas detenidas y ejecuciones de media distancia como para intentar desnivelar. Su capitán, Didier Drogba, funcionó como un talismán para sus compañeros, que lo buscaron de manera permanente.
Pero los pentacampeones demostraron que tienen recursos de sobra para marcar la diferencia. Una rápida combinación entre Robinho y Luis Fabiano, que entregó de taco para Kaká, permitió que el volante del Real Madrid asistiera de forma corta y precisa a Luis Fabiano dentro del área. El atacante quedó solo ante el arquero marfileño, al que fusiló con un disparo alto (1-0, 25’).
Con una sola jugada, Brasil se adelantó en el marcador y manejó las acciones de ahí en adelante, ante un equipo africano que le mostró mucho respeto.
Algunos lujos y contundencia
El complemento mostró a un Brasil ampliamente dominador. De entrada estiró la ventaja, de nuevo con Luis Fabiano como protagonista. El delantero del Sevilla se sacó a dos adversarios de encima y con una definición baja y fuerte batió a Boubacar Barry (2-0, 50’).
El resultado no amedrentó a los africanos, que pudieron descontar a los 54 minutos con un cabezazo de Drogba que salió desviado, tras el centro de Aruna Dindane.
Pero los sudamericanos impusieron su experiencia, talento y oficio, que no demoraron en plasmar en el tanteador. De esa manera, en un desequilibrio por izquierda, Kaká envió un centro para que Elano sólo tuviera que empujar el balón al fondo de las mallas (3-0, 62’).
Con más ímpetu que juego, los marfileños se acercaron al arco de Julio César a fuerza de pelotazos. En uno de ellos, Gervinho sirvió una pelota por alto que Drogba cabeceó al palo izquierdo del portero brasileño (3-1, 79’).
Sobre el final y tras la expulsión por doble amarilla de Kaká, el equipo africano intentó acercarse pero sin inquietar a la última línea verdeamarela.
Los dirigidos por Dunga enfrentarán a Portugal el 25 de junio a las 16:00 en Durban mientras que Costa de Marfil hará lo propio con RDP de Corea en Nelspruit, en mismo día y horario.
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